Como parte de la estrategia para enfrentar la alta prevalencia de enfermedades crónicas y obesidad imperantes en el país, Puerto Rico se ha convertido en el pionero en la prohibición las grasas trans en las Américas. De acuerdo a estudios realizados en 2005, existe en Puerto Rico una prevalencia de diabetes del 12.5%, hipertensión 31.2%, y obesidad/sobrepeso 63.3%, además de un aumento galopante de las enfermedades crónicas. De otro lado, las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en Puerto Rico, por lo cual resultaba imperativa una política pública para prevenir estos factores de riesgo de forma urgente. Respondiendo a esta necesidad, la Legislatura de Puerto Rico aprobó la ley que prohíbe las grasas trans de todos los alimentos preparados y vendidos por los establecimientos de comida en Puerto Rico. De esta manera, Puerto Rico no sólo se e une, sino que se pone a la vanguardia de los esfuerzos por eliminar las grasas trans de los alimentos en las Américas.Las grasas trans se encuentran principalmente en los alimentos que contienen aceites parcialmente hidrogenados; estos aceites hacen que los alimentos tengan una mejor textura y se conserven por más tiempo, lo que resulta atractivo para los industriales. La investigación ha demostrado que las grasas trans contribuyen a las cardiopatías al aumentar los niveles del "colesterol malo" (lipoproteína de baja densidad, o LDL) y reducir los niveles del "colesterol bueno" (lipoproteína de alta densidad, o HDL).
Hace algunos meses se convoco una reunion donde se reunieron miembros de la OPS (organización Panamericana de la Salud) e Industrias para discutir la eliminación de las grasas trans en las américas. Un grupo de expertos en nutrición y salud pública solicitaron a los líderes de la industria alimentaria (liderados por Burger King, Inc., Cargill Inc., ConMéxico (Consejo Mexicano de la Industria de Productos de Consumo A.C.), Grupo ARCOR, Kraft Foods, Kellogg Company, McDonald's Corporation, Nestlé, PepsiCo, SADIA, SA, Watt's SA y Yum! Brands, Inc. ) que se unan a los esfuerzo para eliminar las grasas trans, producidas industrialmente, de los alimentos, y se conviertan en aliados para promover una alimentación saludable en las Américas.
La mayoría de industrias participantes coincidió en que la eliminación definitiva tendría lugar a finales del 2008.
TENGA EN CUENTA ALGUNAS CIFRAS:
- Una reducción de tan sólo cuatro gramos de grasas trans diarios podría prevenir 225,000 ataques al corazón en América Latina y el Caribe.
- Algunos logros obtenidos en diversos países son el rotulado obligatorio en norteaméricca, Chile y Argentina, o las prohibiciones a las grasas trans en los restaurantes de Nueva York y otras ciudades de los Estados Unidos.
- con una disminución de 2% (4.5 gramos) en el consumo diario de grasas trans evitaríamos la muerte de entre 30 y 130 mil personas en la región. Si redujéramos la cantidad de grasas trans en 4% (9 gramos) se salvarían las vidas de entre 62 y 225 mil personas.
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